Noticias
noviembre 29, 2020

Ministro de Ambiente recibió en Providencia y Santa Catalina las máquinas que convertirán residuos de madera en abono

Ministro de Ambiente recibió en Providencia y Santa Catalina las máquinas que convertirán residuos de madera en abono
  • Operación Cangrejo Negro, por la restauración ecológica de San Andrés, Providencia y Santa Catalina, ya inició acciones para darle un nuevo ciclo de vida a los residuos que el huracán Iota dejó a su paso.

Providencia y Santa Catalina, 29 de noviembre de 2020. El Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible Carlos Eduardo Correa recibió este sábado las máquinas con las que se triturarán y procesarán residuos orgánicos como troncos, tablas y ramas para aprovecharlos como insumo para el abono de los viveros que se construirán en el archipiélago durante su restauración ecológica.

“La Armada nos trajo esta máquina. La vegetación de Providencia y Santa Catalina quedó en el suelo, muchos árboles y ramas son parte de los residuos que debemos recoger, los vamos a triturar para convertirlos en biomasa que usaremos en los megaviveros y en los patios isleños que vamos a desarrollar”, indicó el Ministro.

El jefe de la cartera ambiental anunció que la segunda máquina chipeadora llegó también a Providencia para apoyar este trabajo a partir de hoy y una tercera se va a encargar en los próximos días de triturar escombros para construir adoquines y seguir implementando la estrategia de economía circular que lidera el Ministerio de Ambiente.

Las máquinas chipeadoras, de un peso aproximado de cuatro toneladas cada una y procedentes de Bogotá y Villavicencio, llegaron a las islas con el apoyo de la Fuerza Aérea, la Armada Nacional y gracias al compromiso de la empresa privada que las puso a disposición del pueblo raizal para la pronta recuperación ecológica de sus ecosistemas.

El contralmirante Juan Ricardo Rozo, comandante de la Fuerza Naval del Caribe, destacó el trabajo realizado por la tripulación del barco anfibio ARCARC Armada de la República de Colombia Golfo de Urabá y por el personal de la Armada que ayudó a desembarcar la maquinaria, como muestra del compromiso de sus hombres y mujeres que también se unieron por el archipiélago.