Más de 1.200 habitantes del corregimiento de Chiquí, en Córdoba, serán los primeros beneficiarios de un innovador plan nacional que apuesta por soluciones basadas en la naturaleza para reducir el riesgo de desastres climáticos.

Bogotá, 11 de junio de 2025 (@Minambienteco) – Colombia avanza hacia la adaptación climática de la mano de las comunidades en sus territorios. Por eso, el corregimiento de Chiquí, en el municipio de San Bernardo del Viento (Córdoba), será el escenario del primer piloto de ecorreducción del riesgo de desastres (Eco-RRDECO-RRD Reducción de Riesgo de Desastre basado en Ecosistemas) del país. Más de 1.200 personas se beneficiarán de esta iniciativa que busca fortalecer la resiliencia de comunidades y ecosistemas frente a los efectos del cambio climático, utilizando los recursos de la naturaleza como herramienta principal.

El proyecto, liderado por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible con el apoyo de Fondo Acción, se encuentra actualmente en su etapa preparatoria para iniciar la ejecución en campo. Su eje central es la rehabilitación ecológica del complejo cenagoso del delta del bajo Sinú, a través de acciones como la limpieza superficial de caños y canales, la siembra de árboles nativos en las riberas de las ciénagas y la implementación de un Sistema de Monitoreo Comunitario Participativo.

Con estas medidas se busca reducir el riesgo de inundaciones y mitigar los impactos negativos de la variabilidad climática, especialmente en zonas donde las afectaciones ya han provocado el desplazamiento de familias, daños a la infraestructura vial y pérdidas económicas significativas por la destrucción de cultivos y potreros.

“Con la implementación de estas acciones lograremos reducir el riesgo de inundaciones, evitando la pérdida de cultivos, viviendas, entre otros; mejorar la calidad de vida y la seguridad alimentaria; disminuir la necesidad de obras de cemento, al prevenir la erosión costera; atraer inversiones y apoyo de programas de conservación y restauración ecológica; impulsar la generación de empleo en viveros; y potenciar el turismo ecológico”, afirmó la ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Lena Estrada Añokazi.

El piloto Eco-RRD busca además recuperar servicios ecosistémicos clave para la región, como la provisión de peces para el consumo humano, la regulación natural de inundaciones a través de la protección del manglar y la vegetación ribereña, y la fertilización de suelos para cultivos tanto comerciales como de subsistencia. También se fortalecerá la oferta cultural y turística del territorio.

La iniciativa cuenta con el respaldo de la cooperación internacional, a través del programa Euroclima y la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECIDAecid Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo). Euroclima es financiado por la Unión Europea y cofinanciado por el gobierno federal de Alemania (BMZ), así como por los gobiernos de Francia y España, mediante el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación.